La Teoría Critica De Thorstein Veblen

El precio original era: $32.000.El precio actual es: $25.600.

Autor

Editorial

ISBN

9788498366396

EAN

Hay existencias

«La trayectoria actual de la ciencia asegura que las generaciones futuras adquirirán la capacidad técnica para tomar tales decisiones# El Homo sapiens, la primera especie verdaderamente libre, está a punto de licenciar la selección natural, la fuerza que nos hizo. No existe destino genético fuera de nuestro libre albedrío, no se nos ha provisto de ningún norte hacia el que podamos trazar el rumbo. La evolución, incluido el progreso genérico en la naturaleza y la capacidad humana, será a partir de ahora cada vez más el ámbito de la ciencia y la tecnología atemperadas por la ética y las opciones políticas. Hemos alcanzado este punto después de un largo camino de fatigas y autoengaños. Pronto tendremos que mirar hacia nuestro interior y decidir en qué queremos convertirnos» 1. 1. EL AMBIENTE CULTURAL DE LA ÉPOCA Desde finales del siglo XIX, la sociología Norteamericana ha tenido un gran desarrollo. Han existido dos corrientes de la sociología americana, la conservativa o conservadora de Summer a Parsons y la radical de Veblen a Mills, especialmente en lo relativo al conocimiento de la propia sociedad en sus principios y en sus diversos elementos 2. En su libro Teoría de la clase ociosa (subtitulada, Un estudio económico sobre la evolución de las instituciones) 3, aparecido en 1899, analiza la dicotomía fundamental, desde su punto de vista, entre los productivos y los improductivos, entre el instinto de laboriosidad y el innecesario e insoportable despilfarro del ocio ostentoso. El lujo social de la clase ociosa es el resultado coherente del régimen de la propiedad privada y de su dominio de las fuentes de riqueza. Son los capitanes de industria los que consiguen al mismo tiempo, en virtud de su propiedad, el ocio y el poder. El Gobierno estatal acaba por encarnar la defensa de los intereres de los negocios (Teoría de la empresa de negocios) 4. Veblen se muestra crítico respecto al «hombre de negocios» de la modernidad, pero encuentra positiva la función del «ingeniero»